Desde 1919, Bentley viene fabricando algunos de los automóviles más lujosos del mundo, siempre con un toque especial de distinción británica y procurando mantener el espíritu deportivo que siempre ha caracterizado a la marca del logo alado. En 1931, Bentley pasó a manos de Rolls-Royce y en la actualidad forma parte del grupo Volkswagen, pero su personalidad se mantiene intacta, tanto en su manera casi artesana de preparar los coches como en su pasión por los motores de alto rendimiento.
Un ejemplo del espíritu Bentley sería el Mulsanne, una berlina de lujo que sobrepasa los cinco metros y medio de largo y que acaba de recibir un nuevo rediseño, siendo ya tres las versiones que hay en el mercado, el Mulsanne, el Mulsanne Speed y el Extended Wheelbase. Cada una de estas joyas está construida a mano tras 400 horas de trabajo.
BentleyEste coche contiene suspensión adaptable y un interior de auténtico lujo, su tamaño lo convierte en un auténtico crucero, un superyate de la carretera, que, pese a su volumen y peso, se va a más de 2.000 kilos, ofrece una potencia fuera de lo común. En sus modelos normales va de 0 a 100 en menos de 5,3 segundos y tiene una velocidad punta de 296 kilómetros por hora.
En la versión más grande, con 2.700 kilos, llega a 5,82 metros y su motor V8 de 6,75 litros y 512 caballos de potencia sigue ofreciendo un resultado sorprendente: 5,5 segundos de 0 a 100 y una velocidad punta algo inferior. A cambio, claro, todo el espacio del mundo, lo que permite colocar asientos con reposapiés deslizante.
Si estáis enamorados de este coche y de la velocidad, todavía hay un paso más con el Mulsane Speed, capaz de colocar sus casi tres toneladas a 306 kilómetros por hora y de 0 a 100 en 4,9 segundos. Ni que decir tiene que uno de sus aspectos más destacados son sus frenos de disco.
BentleyDentro del Mulsane encontraremos lo habitual en Bentley, materiales nobles como la madera, unos asientos pensados para el confort, acero, un amplio catálogo de pieles y el acceso a la última tecnología, gracias al sistema especial de entretenimiento -opcional al precio de 14.000 euros- con una pantalla táctil, navegador y disco duro. En la parte de atrás hay tabletas integradas de 10 pulgadas con 4G, WiFi y Bluetooth, convirtiendo este coche en una sala de reuniones portátil.
Armado con varios tipos de conducción accesibles desde un sencillo mando, el Mulsane se muestra como una auténtica joya de la carretera, ideal para trayectos largos o en los que el trabajo de alto nivel sea una prioridad. El precio así lo demuestra, ya que partimos de casi 250.000 euros, con una gran cantidad de opciones y modelos que pueden elevar esta cifra considerablemente.