El Honda NSX fue el coche que permitió a Honda demostrar que era capaz de crear un deportivo tan rápido como elegante. El coche superó los atributos de los deportivos más consagrados de su época, como lo eran el Ferrari 348 y el Porsche 911. ¿Qué tenía de especial el Honda NSX? ¡Absolutamente todo!
La historia de este deportivo empieza con una hoja en blanco y el sueño de Honda de diseñar un coche que fuera liviano y veloz, manteniendo el confort y la seguridad del conductor. Sin saberlo, la marca japonesa estaba a punto de demostrar que son capaces de hacer realidad su lema: hacer posible, lo imposible.
Historia del Honda NSX
El origen del Honda NSX se remonta al lanzamiento del prototipo de Pininfarina HP-X, el Honda Pininfarina Experimental en 1984. Este automóvil era reconocido por su motor Honda de dos litros que fue pensado únicamente para competir en Fórmula 2. Lamentablemente nunca pudo competir debido a un cambio en la reglamentación de la competición.
Matthew Lamb editada con licencia CC BY 2.0El objetivo de Honda de superar las ventajas de Ferrari se cumplió seis años después. Durante ese tiempo la marca llegó a plantearse hasta 20 configuraciones mecánicas distintas, hasta decidirse por el motor v6 central transversal.
El Honda NSX fue presentado en el Salón de Chicago el 9 de febrero de 1989 por Acura, la división americana de Honda. En marzo de ese mismo año fue llevado al Salón de Ginebra por los pilotos del equipo McLaren Honda, es decir Prost y Senna. En junio de 1990 arrancaría su fabricación en Tochigi, Japón.
La fórmula del éxito del Honda NSX
Brian Snelsol editada con licencia CC BY 2.0La primera serie del Honda NSX contaba con un motor V6, con 3,0 litros de cilindrada y 270 CV de potencia. La caja de cambios ofrecía velocidades manuales, aunque también estaba disponible en versión automática con cuatro velocidades.
El NSX de Honda fue fabricado totalmente en aluminio. De hecho, la gran ventaja de este coche sobre los demás deportivos no era su motor, sino su monocasco fabricado en dicho material.
Este coche solo contaba con dos largueros longitudinales de acero y plástico en sus spoilers, ¡hasta el gato era de aluminio! Y es que al fabricar el motor, la suspensión y el bastidor en aluminio lograron ahorrarse aproximadamente 300 kilos de peso en el chasis.
Quizá no fue el auto más veloz de la historia, pero era tan ligero que podía competir con modelos de mayor potencia y resultar vencedor. El NSX fue fabricado hasta 2005 y hoy en día, más de 25 años después, aún se pueden encontrar algunos modelos en las calles funcionando en perfecto estado.
Wolfgang Messer editada con licencia CC BY 3.0En la actualidad el Honda NSX es mucho más apreciado que al momento de su lanzamiento. Si bien en los 90 fue visto como una opción económica de los deportivos del momento, hoy en día es considerado un coche de lujo.