Koenigsegg no es una de las firmas automovilísticas más conocidas, debido, sobre todo, a que se dedica a un segmento muy concreto del mundo de los coches, los superdeportivos de lujo. Fundada en 1994, el trabajo de este sello sueco ha destacado por la atención al detalle y a su trabajo casi artesanal, con una producción de apenas dos automóviles al mes. A lo largo de su corta historia han producido grandes modelos, como el CCXR, nombrado por la revista Forbes como uno de los coches más hermosos de la historia, o el Agera, elegido por el programa de la BBC Top Gear como 'hipercoche' del año.
Con estos antecedentes, la gente de Koenigsegg ha puesto toda la carne en el asador, o deberíamos decir, en el acelerador, para presentar el Regera, un supercoche de aspecto sobrio y práctico, muy en la línea del diseño sueco, y que destaca por ser uno de los pocos deportivos híbridos del mercado, presumiendo de una aceleración de ensueño.
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El Regera es un cupé de dos puertas con un motor de 5 litros Twin Turbo V8m, al que acompañan tres motores eléctricos más. El resultado es una cifra de locura, 1782 caballos de potencia y 2000 nm de par. La estructura final prescinde de un grupo de transmisión intermedio y usan un sistema propio llamado Koenigsegg Direct Drive. La potencia de estas baterías le permite una autonomía de 50 kilómetros en modo eléctrico.
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En cuanto a su potencia, el Regera necesita un nuevo tipo de medida estándar, ya que sube de 0 a 400 kilómetros por hora en menos de 20 segundos. Una aceleración y velocidad que mezcla la capacidad de aceleración de los motores eléctricos con la potencia de su motor V8. Con una producción limitada a 80 unidades es inevitable que este magnífico deportivo sea uno de los deportivos más deseados por coleccionistas y apasionados de la velocidad. Eso sí, por el momento el precio del Koenigsegg Regera no está al alcance de cualquiera, cuesta 1,8 millones de euros.
