Vista frontal de un Maserati Bora de color negro
Mr.choppers editada con licencia CC BY-SA 3.0

Maserati Bora, la máxima expresión de Maserati

Coches

Este superdeportivo se convirtió en uno de los coches más deseados de los años 70, combinando un diseño atractivo con una técnica excepcional.

Maserati es una de las grandes marcas de la industria automovilística italiana, con más de 100 años de trayectoria a sus espaldas. Bien es cierto que su camino está lleno de altibajos, desde sus inicios volcados a la competición y el mundo deportivo, a la producción de coches de alta gama en clara competencia con Ferrari o Lamborghini.

A finales de los años 60, con la compra de Maserati por parte de Citroën, se abrió una época de colaboración entre las dos marcas que permitió a la compañía del tridente unir su buen hacer con el diseño de deportivos al gran trabajo de ingeniería de la empresa francesa.

Fruto de ese trabajo nació el que muchos consideran como el mejor de los coches fabricados por Maserati, el Maserati Bora. Este cupé de dos puertas apareció en 1971 cumpliendo con las líneas y la potencia habituales, pero con detalles tan importantes como la suspensión independiente y los frenos, derivados de la ingeniería de Citroën.

Parte trasera de un Maserati BoraAlexandre Prévot editada con licencia CC BY-SA 2.0

Su diseño, obra del mítico Giugiaro, es reconocible todavía hoy en día, destacando su parte trasera, más alta que la de sus competidores de la época y pensada para albergar un maletero funcional, así como los faros escamoteables. Su cuadro de luces trasero es todo un clásico. Este maletero y otras ideas novedosas, como un volante que se replegaba para facilitar la entrada y salida del coche, hicieron del Bora un coche tan conocido como deseado.

En cuanto al motor, Maserati hizo un coche rápido. Contó con varias motorizaciones, siendo la más habitual un motor V8 de 4719 cc, con una potencia de 310 caballos. Su peso apenas superaba los 1500 kilos, lo que junto a su excelente coeficiente aerodinámico le permitía subir de 0 a 100 en 6,5 segundos con una velocidad punta de 261 kilómetros por hora. También existió una versión para el mercado americano ligeramente más potente, con un motor de 4,9 litros.

El Maserati Bora estuvo en producción hasta 1978 y sólo se fabricaron 524 unidades. Ni que decir tiene que hoy en día son piezas de coleccionista.

Alfredo Álamo
Alfredo Álamo

Escritor, soñador, amante de los viajes largos y sin prisa, disfruto tanto con las cosas sencillas como con los últimos gadgets tecnológicos, con los lugares solitarios y los conciertos abarrotados, la comida tradicional y la nueva gastronomía. Contradicciones, creo, que hacen la vida mucho más interesante.