Los espías más afortunados del periodismo sobre ruedas habían logrado cazar algunos prototipos meses atrás y su aspecto, junto con el conocimiento que teníamos del nombre que iba a tener y la ausencia de turbo nos permitían hacernos una idea de qué clase de coche estaban preparando los de Stuttgart. Sin embargo, como suele pasar, igualmente tuvimos sorpresas y ese verdadero sueño para los puristas de Porsche se convirtió en realidad con la presentación en el pasado Salón de Ginebra del 911 R.
El nuevo vehículo alemán es una vuelta a los orígenes en toda regla, una revisión de la historia más gloriosa del fabricante. En plena era del turbo en gamas como la mismísima 911 o en coches como los 718 Boxter, este nuevo deportivo ha optado por renunciar montando bajó el capó un motor atmosférico, a la antigua usanza, con seis cilindros, de cuatro litros, con 500 caballos de potencia a 8.250 revoluciones por minuto y un espectacular cambio manual de seis velocidades.
PorscheLa razón de estos números es que bajo las bonitas líneas de este Porsche 911 R se esconde en realidad una especial versión del GT3. En esta oda al purismo, a las experiencias que proporcionaban los coches de la vieja escuela, como aquellos automóviles homónimos de los sesenta de los que toma por ejemplo el colorido vinilado, se encuentra la motorización de un GT3 RS, la carrocería de un GT3 y una aerodinámica actualizada a la baja.
De hecho, este coche es el más ligero de cuantos pueblan los 911, superando incluso al 911 GT3 R. El secreto ha sido el empleo de carbono en todos los lugares donde ha sido posible, desde el capó a las aletas, en combinación con el magnesio, que compone la cubierta, el plástico que se ha empleado para ventanillas laterales y luna trasera, así como la eliminación de los asientos de la parte de atrás, la reducción de aislantes y tener la radio o el sistema de climatización como equipaciones opcionales.
PorscheAdemás, esta bestia del asfalto añade un eje trasero direccional, también proveniente del GT3, equipo de frenos cerámicos de gran resistencia, un control de estabilidad perfectamente adaptado a las características tan especiales que posee y una aerodinámica que de igual modo acompaña a las virtudes del vehículo.
El conjunto logra que este nuevo Porsche 911 R con un peso de 1.370 kilos alcance los 100 kilómetros por hora desde parado en 3,8 segundos y disfrute de una velocidad máxima que se sitúa en los 323 km/h. Del mismo, según ha confirmado el fabricante alemán, solamente se construirán 991 unidades que ya están adjudicadas. ¿El precio de esta verdadera obra maestra del buen gusto automovilístico? Poco más de 200.000 euros.