El buen tiempo se instala entre nosotros y tanto los que tenemos un jardín o una terraza a mano como los que no, soñamos con fines de semana interminables bajo el sol, con pajarillos cantando de fondo y una buena barbacoa asando unas hamburguesas. Y para un cometido tan noble como delicioso, pocas parrillas hay tan especiales y tradicionales como las kamado de Monolith.
Y es que si bien en suelo patrio somos más de las parrilladas en pleno monte rodeados de pinos, con chorizos, morcillas y chuletas dorándose en las brasas, que está muy pero que muy bien, cada vez más las influencias de nuestros amigos estadounidenses hacen mella en nosotros y uno de sus deportes nacionales, la barbacoa, ha llegado de pleno a nuestra vidas. Se ha metido tan hondo, tan hasta el fondo de la cocina, que hasta las más interesantes y desconocidas tendencias nos han alcanzado.
Monolith
Una de estas es la de las kamado, barbacoas entre barbacoas, auténticas reinas de las brasas, casi una ciencia en sí mismas —sin exagerar— cultivada durante siglos y siglos por habitantes del Pacífico, África y Asia, sobre todo por japoneses. Ellos, con recipientes cóncavos fabricados con barro u otros elementos naturales similares comunes en sus entornos, eran capaces de cocinar utilizando la menor cantidad de leña o carbón posible una gran variedad de platos y ahora son los responsables de inspirar estas odas al buen gusto tanto literal como metafórico.
Monolith
Porque toda esa sabiduría no pasó desapercibida y el resultado son barbacoas construidas en cerámica porosa y aislante panal de abeja, con mucha innovación a sus espaldas, que con sus capacidades refractarias permiten que cualquier receta que podamos elaborar en ella, desde asados de carne a pescados, desde arroces a potajes, queden en su punto óptimo con una cocción a ultrabaja temperatura y una aplicación del calor uniforme, sin puntos calientes. Porque sí, no solamente podemos hacer platos a la brasa, sino también a la plancha, al horno, ahumados o a temperaturas tradicionales.
Enfúndate tu delantal "Kiss the chef", dispón la materia prima en las mesas de madera de teca que la mayoría de modelos kamado de Monolith incluyen y... ¡que vivan las barbacoas!