Cuenta una leyenda que allá por el siglo XIII, en un idílico lago de Surrey, al sudeste de Inglaterra, una joven y bella mujer se bañaba apaciblemente. Sin esperárselo, de forma totalmente improvisa, un hombre apareció montado a lomos de caballo. El desconocido se introdujo en el agua con ella y, encandilado por la hermosura de la fémina, la llevó a zambullirse con él hacia la parte más profunda. Y allí, sin saber muy bien cómo, se ahogó.
El relato cuenta que el jinete no era otro que el malvado príncipe Juan, hermano del rey Ricardo I de Inglaterra, y que la doncella, desde entonces, merodea en las medianoches las cercanías de aquel lago. Esa gran masa de agua alimentada por un privilegiado manantial es hoy en día conocida como Silent Pool, «piscina del silencio», y es el hogar de la destilería que ha tomado su nombre para ella y su ginebra, Silent Pool Gin.
Se trata de una ginebra de estilo clásico, con gran cuerpo y notable frescor, especialmente agradable para cualquier paladar. Elaborada a partir de veinticuatro botánicos como el grano del paraíso, la miel o la angélica de Bulgaria, ha sido tan especial su concepción, tan laborioso su proceso de alumbramiento, tan compleja su artesanal producción, que los responsables de Silent Pool Distillers decidieron celebrarlo por todo lo alto.
Silent Pool Distillers¿Cómo? Envasando la Silent Pool Gin en una botella de 9 litros convirtiéndola, por tanto, en la botella de ginebra más grande y más cara del mundo con un precio de 5.000 libras esterlinas, poco más de 6.000 euros.
El inmenso envase, lejos de ser una simple versión agigantada de la botella habitual, es una obra de arte en sí misma. Partiendo del diseño inspirado en los botánicos de la ginebra y en la leyenda del lago creado en su momento, su creadora, Laura Barrett, lo ha reinterpretado pintándolo a mano. En contraste con el turquesa del vidrio, evocador del Silent Pool, con un color cobrizo la artista ha dado forma a las diferentes hierbas y especias que hacen posible el gin.
Y la obra terminada no ha podido ser mejor, a la vista está.