Todo comenzó cuando el joven Louis Vuitton, con tan sólo diecisiete años, tomó una decisión que cambiaría su vida y la de futuras generaciones: se convirtió en fabricante de baúles. Más de 150 años después, el nombre de Louis Vuitton es reconocido en todo el mundo.
En 1854 abrió su primera tienda, en el número 4 de la rue Neuve-des-Capucines, en París. El negocio sumó a su inventario maletas y bolsos, teniendo gran acogida por parte del público. En 1867, Vuitton ganó la medalla de bronce en la exposición universal de París, lo que le sirvió de escaparate para que otras ciudades se interesasen por sus artículos.
A raíz de esto, abrió su primera tienda en Londres y aprovechando su éxito, se creó la lona Damier, una de las más icónicas y representativas de la maison, en 1888. Cuatro años más tarde el fundador fallecía dejando en herencia la firma a su hijo George. Con el joven al mando, se diseñó y patentó uno de los iconos más eternos y distinguidos del mundo: el Monogram, un estampado con las iniciales de la marca.
La firma seguía sumando éxitos y en 1914 abrió su famosa tienda en el número 70 de los Campos Elíseos. Cuando muere George Vuitton, sus hijos heredan el control de la firma y abren una tienda en Nueva York. En 1980 la firma se une a Moët Hennessy y crean el conglomerado de lujo LVMH. Con motivo del centenario de la lona Monogram, la firma contrata a Marc Jacobs como director creativo y responsable de la línea de complementos, quien introduce también la línea prêt-à-porter.
El saber hacer y la calidad de los materiales se aúnan desde su fundación para crear diseños exclusivos que convierten a la maison en un referente de la marroquinería de lujo. A lo largo de los años, la firma ha creado grandes diseños que reinventa con el paso del tiempo para que no sean olvidados. Celebridades como Gwyneth Paltrow, Jennifer Aniston o Pharrell Williams, han sido embajadores de la firma a lo largo de los años haciendo gala de la exclusividad de Vuitton. Además de Marc Jacobs como estrella inimitable de la marca, Louis Vuitton ha contado con grandes colaboradores del mundo del arte, desde Sofia Coppola hasta el japonés Murakami.
Una empresa con tradición legendaria y liderazgo en el sector del prêt-à-porter. Una de las marcas más poderosas, exitosas e imitadas de la industria de la moda. Poco o nada podía imaginar su fundador, Louis Vuitton, que aquél negocio de maletas y bolsos se convertiría en una de las mejores y más prestigiosas marcas de nuestro tiempo.