Junto a Christian Louboutin y Manolo Blahnik, Stuart Weitzman forma parte de la élite del calzado de lujo. Se trata de uno de los diseñadores de calzado más importantes dentro de la industria de la moda. Desde sus inicios en 1970, la firma trabaja en talleres españoles con más de 150 años de tradición, donde fabrica los que han sido considerados como los mejores zapatos del mundo, concretamente en Elda.
SPERA.de editada con licencia CC BY-SA 2.0Weitzman cuenta con 57 tiendas alrededor de todo el mundo y asegura que sus diseños están dedicados a las mujeres empoderadas. Sus modelos son exclusivos y están fabricados por grandes maestros artesanos. La firma cuida cada detalle para convertir cada lujoso par de zapatos en un aliado cómodo que acompañe a la mujer a sus más importantes citas. El propio diseñador asegura que en la actualidad, la moda está al servicio de la mujer y no a la inversa.
Un tacón de 120 milímetros nunca será una zapatilla, claro, pero sí hay que trabajar para que sea mejor de lo que la cliente espera que sea. Más cómodo. La comodidad es moda; no sufrir es moda.
Sus diseños son elegantes y refinados, con atención a especial a los más clásicos. Entre sus pares más destacados, se encuentran las famosas sandalias Nudist, las botas mosqueteras y los modelos combinados con pedrería y cristales de Swarovski. Además, Weitzman también se dedica al diseño de zapatos de novia, campo en el que destaca por los lujosos detalles que incluyen sus modelos.
SPERA.de editada con licencia CC BY-SA 2.0La alfombra roja ha sido testigo de muchas de sus más aclamadas creaciones, desde los zapatos "Rita Hayworth", que la propia cantante le encargó diseñar para mantener más vivo su recuerdo, hasta los "Cinderella Slippers", decorados con 565 diamantes, que lució Alison Krauss durante los Premios Óscar. Verdaderas obras de arte que sólo la maestría de un diseñador de la talla de Weitzman puede hacer posible.
SPERA.de editada con licencia CC BY-SA 2.0La celebridad de sus zapatos abala los desorbitados precios que los convierten en un objeto de deseo al alcance de una exclusiva minoría. Entre sus distinguidas clientas se encuentran Kate Middleton, Michelle Obama, Beyoncé, Rihanna, Kendall Jenner, Giselle Bundchen y la Reina Leticia, portadoras y embajadoras de los zapatos más caros del mundo.