Hace una década Jean-Claude Biver, ahora presidente de Hublot y presidente de la división de relojes de LVMH, creó junto a un equipo dirigido por el CEO de la marca, Ricardo Guadalupe, un guardatiempo destinado a ser leyenda: el Big Bang. Aquel reloj, bautizado como el gran estallido que dio lugar al Universo, combinó por primera vez en una pieza de alta relojería dos materiales nunca vistos juntos hasta entonces, el oro y el caucho, y cosechó un éxito sin precedentes.
El particular big bang de Hublot dejaría para la posteridad el arte de la fusión como uno de sus principales rasgos, el primordial modelo como contribución a la historia de la relojería y la colección homónima que inició como emblema de un todo un cambio de paradigma tras un cuarto de siglo de existencia. Y es ahora, en la celebración del décimo aniversario de la icónica Big Bang Collection, cuando la suiza vuelve a marcar un antes y un después con tres modelos que conmemoran la efeméride.
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El primero de ellos es el Big Bang Unico Full Magic Gold, una nueva versión con rediseño tanto técnico como estético del Big Bang Unico nacido hace dos años a partir del reloj original y la inclusión en él del movimiento Unico, patentado por su manufactura. La pieza, que cuenta con una elegante caja de 45 milímetros, se fabrica en oro de 18 quilates resistente a cualquier tipo de arañazo e incluye un sistema de fijación de la correa one click.
El Big Bang Tourbillon 5-day Power reserve Indicator Full Magic Gold es el segundo de los relojes que celebran los diez años de la colección, el primer Tourbillon de la nueva generación Big Bang que realiza una vuelta por cada minuto que pasa. Posee un bello movimiento esqueletado y un práctico a la vez que estético indicador de los cinco días de reserva a las 9. Como su hermano, el Unico Full Magic Gold, se fabrica también en una caja de 45 milímetros de oro de 18 quilates resistente a los rasguños.
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Y por último llegamos a la joya de la corona, un modelo que en realidad son diez, una colección dentro de la colección que ha sido llamada la de los diez millones de dólares, la Big Bang “10 Years” Haute Joaillerie.
Porque cuando hablamos de alta relojería hablamos de valores en muchas ocasiones difícilmente calculables, cientos de horas de trabajo de investigación previa, trabajo artesanal y fabricación meticulosa por expertos entre los expertos para alumbrar piezas únicas que alcanzan precios estratosféricos. En este caso hablamos de un millón de dólares estadounidenses cada reloj, de ahí el sobrenombre de la línea.
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Para su realización ha sido necesario emplear tres de las más complejas técnicas de engarzado de piedras preciosas, la invisible, la Clou de Paris y engastado en carril, que requieren cuasi cuatrocientas horas de trabajo. Y lo cierto es que no es para menos, atendiendo al número de gemas talla baguette empleadas: 653 diamantes negros con un total de 41,84 cts para versión negra, 653 diamantes blancos por un total de 40,02 cts para la versión blanca, 653 diamantes y zafiros por un total de 40,41 cts para la versión azul zafiro o 653 diamantes y rubíes con un total de 40,93 cts para la versión rubí.
Además, por si esta colección dentro de la colección no estuviese suficientemente bien nutrida de cualidades, los biseles de estos modelos se fijan por primera vez en Hublot con diamantes trapecio invertidos invisibles. Todos y cada uno de los relojes de la Big Bang “10 Years” Haute Joaillerie se presenta en caja de 45 milímetros con el movimiento automático HUB 1242 con reserva de hasta 72 horas y correa de cocodrilo negra. Pura historia viva de la alta relojería y joyería.