Un IO HAWK en color blanco
IO HAWK Europe

IO HAWK, un transporte individual llegado del futuro

Tecnología

Fue presentado por sus creadores en el pasado CES 2015 como el invento llamado a revolucionar el transporte individual y, pese a que no ha conseguido eso exactamente, sí ha revolucionado el mundo de la tecnología y el de los 'gadgets' con sus múltiples im

En el CES de este 2015, celebrado en enero, hubo un invento en particular que recibió todas las miradas. Una suerte de monopatín motorizado, una especie de hoverboard pero con ruedas, un artefacto casi llegado del futuro que se presentaba como la última revolución en materia de transporte personal. ¿Su nombre? IO HAWK.

Se trata, como decíamos, de una especie de monopatín a motor cruzado con un segway, un dispositivo que funciona con baterías, posee dos ruedas y se acciona con el balanceo y la presión que ejercen los pies del conductor que se monta sobre él.

Según la empresa que lo produce, que tiene el mismo nombre, el particular vehículo alcanza los 10 kilómetros por hora y solamente exige al conductor un buen equilibrio y una capacidad física mínima para poder reaccionar si algo sale mal.

El IO HAWK, al que ya le han salido múltiples imitadores desde su presentación y que en estas fechas aparecen en más de una carta a Papá Noel y los Reyes Magos con el nombre que han recibido, hoverboards, incorpora un par de luces para señalar su posición en condiciones lumínicas difíciles y tiene un precio de partida de 1.799 dólares estadounidenses.

No serás como Marty McFly de Regreso al futuro, porque no volarás, pero casi.

Toni Castillo
Toni Castillo

La curiosidad a veces me pierde y la inquietud hace que me embarre. Pero sin la una y la otra no sería lo que soy. Me gusta lo sencillo, lo simple, tener respuestas y, si no las encuentro, sacar enseñanzas. Levantarse si se cae. Andar y no parar. Sin la tecnología no sería nadie, pero sin un pedazo de papel y un lápiz me encuentro perdido. De ciudad, pero de campo. De mar, pero de montaña. Hedonista de las pequeñas —y a veces grandes— cosas. Definirse no es sencillo, pero al menos lo he intentado.