El objetivo de Magico, con el diseñador Alon Wolf a la cabeza, es el de conseguir los mejores altavoces posibles, gracias a su trabajo con modelos informáticos y análisis de simuladores acústicos. Tras el éxito entre los más selectos audiófilos del Mk I, el S1 Mk II ha sido reinventado por completo.
El diseño es espectacular, sobre todo por el uso de elementos como el aluminio, con el que forman una pieza sin fisuras que alberga el resto de la tecnología. Esta pieza, de por sí, ya indica su voluntad de huir de convencionalismos a la hora de crear altavoces de calidad. Sus formas redondeadas están pensadas para minimizar la resonancia y maximizar la estabilidad y la rigidez de la estructura.
Incorpora la última tecnología en los diafragmas, con especial atención al tweeter de berilio capaz de reducir notablemente la distorsión. Los bajos están soportados de manera espectacular gracias a una combinación de nanotubos de carbono y nanografeno, que aporta ligereza y flexibilidad al conjunto dominado por el motor de neodimio.
La base es convexa y está diseñada para minimizar la difracción y romper las ondas verticales, mejorando de este modo el rendimiento general. La sensibilidad del S1 Mk II es de 86db, la impedancia es de 4 Ohms con una respuesta de frecuencia que va de los 32 Hz a los 50 kHz. Su tamaño apenas supera el metro de altura y los 25 centímetros de diámetro. Su peso se va a los 54 kilos y medio.
El sonido que se obtiene con estos altavoces es de primera calidad, muy vívido y que permite descubrir numerosos detalles de bajo nivel que suelen pasar desapercibidos, con unos bajos muy conseguidos para este tipo de diseño de dos altavoces. Minimalista y con una estética impresionante, esta increíble pieza de tecnología y diseño cuesta unos 15.000 euros el par.
