Lejos quedan los primeros modelos de relojes inteligentes, cuadrados, pesados y con un manejo que se hacía, por ser indulgente, muy complicado. La nueva generación que acaba de presentar Samsung, la de los Gear S3, supone un golpe en la mesa del gigante coreano, que ofrece una calidad y diseño capaz de enamorar tanto a los amantes de la alta tecnología como de los relojes clásicos. Y todo eso, además, en dos modelos de diferenciado diseño, el Gear S3 Classic y el Gear S3 Frontier.
La apuesta vuelve a ser la de un reloj redondo cuyo manejo se hace a partir del bisel rotatorio. Con cada giro pasamos una pantalla, como una barra de desplazamiento, y mantiene los dos botones laterales. Samsung ha decidido usar su propio sistema operativo, Tizen, en lugar de Android Wear, lo que les permite una mayor personalización y control sobre sus funciones.
SamsungEl diseño respecto al S2 ha cambiado bastante. Tenemos un tamaño mayor, 1,3 pulgadas, y dos versiones diferentes, una para cada ocasión. El modelo Classic tiene un bisel fino y elegante, metálico y sin marcas. Los botones son redondos y más pequeños. Junto con un fondo de reloj clásico obtenemos un resultado ideal para ambientes formales.
En cuanto al Frontier, el diseño está orientado a gente más activa y deportista. Con un bisel oscuro y de mayor tamaño, sus botones son más grandes y rugosos. Las correas que podemos ponerle son notablemente más grandes y resistentes que las que hay para el Classic. Eso sí, ahora puedes ponerle cualquier correa de tu elección gracias al uso del estándar habitual. El resultado es un reloj apropiado para excursiones y trabajo al aire libre. En cuanto al peso, este modelo pesa 62 gramos, 5 más que el Classic.
Por dentro no hay diferencias entre ellos, comparten el mismo corazón tecnológico, que no es poco. Pero si los comparamos con el Gear S2, hay varias novedades. No sólo se reciben las notificaciones en el reloj, sino que gracias a su altavoz integrado se pueden contestar las llamadas sin sacar el teléfono. Otro de sus grandes puntos a favor es que integra GPS, es decir, que no necesitas el teléfono para que controle y registre tus rutas.
SamsungLa esfera de los Gear S3 está siempre encendida, aunque cambia su intensidad dependiendo del uso. Tiene 15 diseños preinstalados, que se pueden ampliar desde su propia tienda de aplicaciones, la Gear App Store. Incluso puedes crear tu propia esfera.
El S3 tiene bluetooth y 4 GB de memoria interna, para que puedas llevar sin problemas tu música encima. Además, han desarrollado un buen número de apps dedicadas a este teléfono, como Spotify, Yelp, GolfNavi o Glympse. Como es natural, lleva un sistema de calendario, recordatorios y cuantificación deportiva.
SamsungEn Samsung prometen que la batería del Gear S3 es capaz de aguantar 4 días sin recargar, una duración notable para lo que estábamos viendo hasta ahora. Claro que, como siempre, si haces un uso intensivo del GPS o de las llamadas es posible que tengas que enchufarlo bastante antes.
En cuanto al precio, los dos modelos, tanto el Classic como el Frontier, están disponibles por 399 euros, un precio con el que pretende ganarle la partida a su gran competidor, el iWatch de Apple, aunque este último ha apostado por un estilo de diseño propio, alejado de los relojes tradicionales.