Frente a la costa norte de Mozambique, a lo largo de más de doscientos cincuenta kilómetros comprendidos entre la desembocadura del río Rovuma y la bahía de Quissanga, se encuentra el medio centenar de islas que conforman el bello archipiélago de las Quirimbas. En ellas, parte del parque nacional homónimo, se encuentra la idílica isla privada que coge el Anantara Medjumbe Island Resort & Spa.
Rodeado por las prístinas aguas del océano Índico, innumerables arrecifes de coral, santuario de tortugas marinas, delfines, ballenas y una multitud de peces tropicales, todo ello propuesto como Patrimonio de la Humanidad a la Unesco, el complejo hotelero ofrece en este entorno paradisíaco y sumamente privilegiado una experiencia única.
Anantara Medjumbe Island Resort & Spa
A la incomparable isla de apenas un millar de metros de largo por tres centenares de ancho donde se sitúa el resort, se llega tomando un vuelo desde el continente, de cincuenta y cinco minutos de duración con unas vistas incalificables. Tras el aterrizaje en la pequeña pista insular, los huéspedes estarán solamente a dos minutos a pie de las instalaciones.
El Anantara Medjumbe cuenta con una docena de exclusivos e íntimos alojamientos, las Beach Pool Villas, donde cualquier comodidad que uno pueda imaginar se puede hacer realidad. Están construidas con techos de paja, como marca la arquitectura tradicional local, y decoradas con una lujosa estética rústica en perfecta armonía con la isla tropical que pueblan. Todas y cada una de ellas ofrecen vistas al inmenso océano que baña la costa este africana, acceso directo a la playa de cristalinas aguas y fina arena blanca, una piscina privada donde relajarse tras por ejemplo una jornada de buceo en los arrecifes, una de las muchas actividades que pueden realizarse en el complejo, y una incomparable terraza, donde descansar mientras anochece con el son de las olas rompiendo como telón de fondo.
Anantara Medjumbe Island Resort & Spa
La escapada a un verdadero refugio en el paraíso debe completarse cuasi por obligación con una visita al spa, en el que terapeutas altamente capacitados realizan los más diversos tratamientos de belleza y bienestar que uno pueda desear y por supuesto con gastronomía.
La variada oferta culinaria del complejo puede encontrarse tanto en el Jahazi Restaurant, con cocina local e internacional, como en la propia terraza privada de las villas, con un menús gourmets prefijado o uno elaborado a medida de acuerdo a gustos y deseos de los huéspedes. Para terminar, uno no puede irse a soñar sin pasar por el Bahari Lounge Bar, donde la coctelería más tropical encuentra su espacio.
Anantara Medjumbe Island Resort & Spa, un valioso tesoro africano más con nombre propio.