En pleno corazón de Valencia y a pocos pasos de la Catedral, se encuentra el único hotel-monumento de la ciudad. Caro Hotel es un lujoso alojamiento que conjuga históricas infraestructuras con un estilo urbano e independiente. Un edificio de aire contemporáneo que se funde con los elementos arquitectónicos originales del antiguo Palacio del Marqués de Caro.
Una cita con la historia cuyo interiorismo ha sido realizado por Francesc Rifé. La fachada nos remite al siglo XIX y sus paredes guardan una herencia de más de 2.000 años. El edificio ha respetado en su interior partes de la muralla árabe de la ciudad, propias del siglo XIII, varios arcos góticos y detalles decimonónicos.
Caro Hotel
El alojamiento ofrece un total de 26 estancias diferentes que se distribuyen a lo largo de cuatro plantas. Cada una de ellas tiene nombre propio y una decoración que la diferencia de las demás, respetando siempre la armonía decorativa. Además, también dispone de dos suites especiales: la Habitación de la Torre y la Suite del Marqués.
La Suite del Marqués es la mejor estancia del hotel. Más de 80 m2 distribuidos entre el dormitorio, un salón de té y un salón de baile. Lo más especial de esta estancia es el lienzo que se extiende sobre el techo, pues se trata de un histórico trabajo artesanal de los antiguos propietarios del inmueble. Todas y cada una de las habitaciones representan el silencioso diálogo de las piedras con la estética de Rifé, que aligera los espacios y confiere proporcionalidad.
Caro Hotel
Una de las joyas que alberga el inmueble es el Restaurante Alma del Temple, uno de los más bonitos del mundo según la editorial alemana Taschen y recomendado por la Guía Michelín 2015. Se ubica en el semisótano del edificio y destaca por su equilibrada combinación de luz natural, acero y cristales oscuros, que funcionan como espejos. Una línea gastronómica mediterránea y con toque de autor que se adapta perfectamente a las exigencias de sus huéspedes.
Caro Hotel
Este paraíso del descanso también dispone de una pequeña terraza con piscina propia sobre la vertical de la muralla. En ella se encuentra Meta Bar, un espacio destinado al servicio de cafetería y coctelería. Un lugar irrepetible y genuino que invita a la desconexión. Una forma diferente de visitar la ciudad de Valencia con una combinación perfecta de funcionalidad, confort y diseño.
