La pequeña isla de Santa Lucía se encuentra casi al borde del Mar Caribe, en una situación privilegiada que le hace disfrutar de un clima tropical. Sus playas paradisíacas y sus montañas clavadas en el mar hacen de este lugar un auténtico vivero de paisajes sin comparación. Su industria turística es una de las más exclusivas del mundo, siempre en constante innovación y mejora, como podemos descubrir al acercarnos al Jade Mountain Resort.
Pocos lugares del mundo se pueden comparar a este resort, ubicado cerca del mar y con unas vistas incomparables a las montañas Piti y Gros, iconos visuales de la isla. Está compuesto por 29 suites de gran tamaño diseñadas con especial cuidado para que queden integradas en su entorno y son llamadas “santuarios”.
Jade Mountain Resort
24 de ellas tienen piscinas desbordantes integradas en su estructura, permitiendo algunas de las vistas más impresionantes de todo el Caribe. El resto tienen en su lugar un jacuzzi para disfrutar de un buen descanso tras un día disfrutando de la naturaleza. Y es que en los alrededores de este hotel se puede practicar tanto el senderismo como el buceo.
Como es lógico, las habitaciones tienen baños de hidromasaje con colorterapia y se pueden reservar tratamientos de spa especiales, sesiones de yoga y un sinfín de servicios dedicados al relax y el bienestar. El restaurante del hotel ofrece una amplia oferta gastronómica y una bodega de lo más interesante y existe una gran variedad de ambientes para ir de compras o tomar una copa dentro del complejo.
Jade Mountain Resort
Este resort está orientado a pasar un momento romántico, buscando la paz y la relajación, por lo que no hay televisores en sus habitaciones. No admiten a niños menores de 16 años en sus instalaciones. En cuanto al precio, sus excepcionales santuarios rondan aproximadamente los 1.000 euros por noche, aunque esa cantidad puede aumentar en momentos puntuales de mayor afluencia.
